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EL HUMUS DE LOMBRIZ,
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| Se conoce con el nombre de “Humus” a la
sustancia obtenida, como consecuencia de la digestión y
posterior expulsión, de diverso material orgánico, por algún
tipo de lombriz. La materia resultante es de color marrón oscuro, granulado, y carente totalmente de olor. Aunque cualquier tipo de lombriz, de las aproximadamente 8.000 clases existentes, produce humus, nos referiremos a la llamada “Lombriz Roja” que es la mejor adaptada en cautividad. Esta clase de lombriz se desarrolló en los años 50 en California, y mide unos 6-8 cm. en su fase adulta; Ya en el antiguo Egipto, se protegía a este valioso animal, por considerarse de un gran valor. En presencia de materia orgánica la lombriz chupa a través de la boca el alimento, transformándolo, y eliminando un 60% de lo ingerido en forma de humus. |
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La ventaja de esta lombriz en relación con
la lombriz común es que es mucho más prolífica, y vive 4 veces más que
aquella, llegando incluso a los 16 años de vida, por lo que la
producción de humus a escala industrial es mucho más ventajosa.
Las utilidades de este pequeño animal, además de
producir humus, es que es usado como alimento para peces, pájaros, etc.,
por ser rica en proteínas.
Bondades del Humus:
El uso de fertilizantes químicos en la agricultura,
ha reducido de forma muy importante la fuerza de nuestros campos,
empobreciéndoles en lo que respecta a sales minerales y materia
orgánica, base fundamental para la obtención de los distintos frutos.
| El humus de lombriz se puede considerar un abono orgánico, con una riqueza bacteriana cercana al 100% lo que contribuye a enriquecer el terreno más que cualquier abono químico. La calidad del humus resultante depende del tipo de estiércol utilizado para alimentar a la lombriz; los más adecuados son los procedentes de ganado vacuno u ovino y que contengan, paja (celulosa); este estiércol debe tener un periodo de envejecimiento, hasta que la acidez del mismo sea adecuada, para que pueda ser asimilado por la lombriz sin serle perjudicial. |
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Según nos cuenta Fidel Herrera, que posee
una explotación de Lombriz Roja en Vallelado, el tiempo invertido en la
transformación del estiércol en humus es de aproximadamente un año,
debiéndose controlar la humedad y temperatura, así como el Ph, base
fundamental para que la lombriz se desarrolle en condiciones óptimas, al
cabo del cual se recoge el material y se pasa a una tolva que mediante
una cinta transportadora llega hasta una criba que separa los distintos
gránulos en fino y basto, de idéntica calidad, diferenciándose sólo en
el tamaño. A continuación se envasa en sacos de plástico que se cierran
para que conserve la humedad.
Los beneficios en cualquier tipo de producción
agrícola, con el uso del humus son fáciles de comprobar: germinación más
rápida, plantas más grandes y de un aspecto saludable, adelanto de la
floración y del fruto., no necesitar de ningún fertilizante ni abono
químico. Actualmente, se suele utilizar en jardinería, en huertas, dando
unos resultados sorprendentes. Es el abono ideal para cualquier terreno,
no siendo perjudicial cuando se echa en exceso. Se puede afirmar
claramente que es el abono del presente y del futuro, pues únicamente
utilizando este tipo de productos recuperaremos la tierra que
disfrutaron nuestros antepasados, y así poder hacerla productiva sin
envenenarla con abonos y productos, y hacerla estéril.
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